Análisis mediante pensamiento crítico de la afirmación “el ser humano sólo usa el 10% de su cerebro”:
El tema presente, que ha sido muy debatido en Internet, tanto en círculos profesionales (científicos) como no profesionales, ha sido objeto de controversia ya que esta falsa creencia fue dada por válida durante muchos años, alimentada por los que creían ciegamente en ella y también por los “oportunistas” que creyeron poder sacar beneficio del mismo ( como por ejemplo los defensores de los fenómenos paranormales que se basaban en este mito para explicar los poderes psíquicos alegando que si usábamos todo el cerebro desarrollaríamos dichos poderes especiales). Pensando benévolamente la difusión de esta creencia se debió mayormente a una falta de información al respecto. Pero los medios tuvieron buena parte de culpa en la propagación y difusión de este mito, ya que muchas campañas publicitarias a nivel mundial basaron sus eslogans para vender sus productos en esta afirmación. Incluso se afirma que el propio Albert Einstein apoyó el mito. Pese a que se desconoce el origen de este mito parece cierta la afirmación que dice que “una mentira repetida 1000 veces se convierte en verdad”, algo así pensamos debió pasar.
En la wikipedia y en otras fuentes consultadas se razona debidamente la falsedad e inconsistencia de ese mito. Veamos algunos razonamientos críticos que justifican la no validez de tal afirmación.
Carece de sentido que existan grandes áreas del cerebro sin utilizar. Si el 90% del cerebro no fuera necesario la evolución nos habría dotado de un cerebro más pequeño ya que la naturaleza no hace cosas innecesarias. Además un cerebro más pequeño sería beneficioso para el cuerpo ya que se reduciría el gasto energético considerablemente.
Siempre que se produce una lesión cerebral se pierde alguna capacidad cerebral lo que según el mito debería suceder sólo si se dañara parte de ese 10% que usamos, algo que no sucede.
Se ha comprobado que todas las áreas del cerebro tienen alguna función específica, no hay ninguna redundante y que todas las partes del cerebro tienen algún nivel de actividad.
Se sabe que si una célula no se utiliza degenera. Según el mito deberíamos tener el 90% de nuestras células cerebrales degeneradas, algo evidentemente falso.
Desde el punto de vista de la evolución del ser humano es improbable que un cerebro “sobrante” en un 90% se desarrollara. Lo razonable es pensar que el cerebro, al igual que el resto del cuerpo es el resultado de la adaptación a las exigencias del entorno, con lo que no va a desarrollar más un órgano la naturaleza innecesariamente. Pensamos que el grado de desarrollo del cerebro responde a las necesidades que le han ido surgiendo al hombre durante su evolución. Incluso durante el sueño todo el cerebro está activo, lo que varía de unas partes a otras es su nivel de actividad.
Quizás uno de los aspectos que ha hecho que cobrara tanta fuerza este mito y que se lo creyera tanta gente ha sido que era tan fabuloso (prometía tanto) que queríamos creérnoslo y ante la duda le dábamos el beneficio de la duda porque esa afirmación nos gustaba mucho y nos hacía soñar con un futuro fantástico donde el ser humano habría aprendido a usar todo su potencial.
Finalmente y como conclusión a este análisis decir que todas estas evidencias encontradas desmontan la creencia de que tan sólo utilizamos el 10 % de nuestro cerebro y que si supiéramos utilizarlo todo seríamos seres “superinteligentes” y tendríamos “ superpoderes” tales como mover objetos, comunicarnos telepáticamente (haría innecesarios los teléfonos incluso el habla) y otros que pudiéramos llegar a imaginarnos, algo que pertenece al campo de la fantasía.
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